Países como Holanda, siempre se han caracterizado por el uso de las energías limpias, para poder funcionar como una sociedad sustentable. Característicos son sus molinos de viento para generar energía eléctrica, para diversos usos. Este recurso, actualmente se utiliza para generar energía eléctrica, pero anteriormente se utilizaba en la navegación, para moler el grano y para sacar agua de los pozos. En los últimos años, han pretendido utilizar esa energía con motivos de transporte.

La red de ferrocarriles nacionales VIVENS, es una pionera en el uso de energía eólica para el funcionamiento de sus trenes. Todos los trenes que ahora ya circulan, son impulsados por este tipo de energía, y gracias a ella, realizan 1.2 millones de viajes diarios. Este acto beneficia a más de 600,000 pasajeros diarios, a través de la red de trenes eólicos que tiene VIVENS, mismos que no dejan rastro de C0₂ en sus trayectos.

La energía eólica recolectada, proviene de la energía que se obtiene gracias al viento. Ésta se recolecta con los aerogeneradores, que son grandes molinos de entre 40 y 50 metros de altitud y con hélices de hasta 23 metros de diámetro. Sus turbinas se distribuyen en parques, que se ubican en zonas llanas y ventosas.

Según datos del diario El País, a la fecha operan 2,000 aerogeneradores, que producen 4.5% del total de la electricidad que se consume en Holanda. Lo que representa un porcentaje alto, con muchos beneficios, siendo que es una población pequeña, que cuenta con 16.8 millones de habitantes, 34,000 kilómetros de territorio, de los cuales, un tercio pertenece al mar o canales de agua.

 “Firmamos un contrato por una década y somos el primer país del mundo en lograrlo, con ayuda de nuestros parques eólicos y también de otros plantados en el extranjero. El siguiente paso será promover la energía sustentable en las grandes empresas, animando a sus empleados a cambiar el coche tradicional por el eléctrico, el ferrocarril o la bici”, dijo Roger Van Boxtel, director general de Ferrocarriles Holandeses.

Van Boxte agrego: “Una quinta parte del C0₂ que se genera en el país, proviene de los automóviles, la gasolina y el diésel, por lo que el consumo de este tipo de energéticos, debe ser cosa que se olvide pronto, para migrar a formas más eficientes de energía.”

Una gran acción que traerá como consecuencia muchos beneficios para Holanda. Países como el nuestro debería invertir en este tipo de energías, con el ya tan mencionado Bono Verde, que nuestra capital percibirá próximamente.

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