En todas las ciudades del mundo, uno de los principales problemas que se generan, literalmente, es la acumulación de basura, miles de toneladas de desechos se llegan a producir entre todos los habitantes, por lo cual llega un momento en el que se deben hacer acciones rápidamente. Hoy vamos a revisar el panorama de una de las urbes más grandes del mundo: la Ciudad de México.

La ciudad capital de México es la segunda en el mundo que genera más basura, aproximadamente 13 mil toneladas al día, producto de los cerca de nueve millones de habitantes que viven en ella, más otros millones más que llegan desde zonas aledañas, toda la basura se acumula en camiones, carritos y contenedores, para ser llevada a una estación de transferencia, realizar una selección de desechos y ser enviados a una plata de tratamiento o a un relleno sanitario.

Suena bonito el proceso, pero en México, la poca cultura del reciclaje en la población, la falta de información y acción por parte de instituciones públicas, y el aprovechamiento de recursos de manera clandestina, entorpecen las medidas, creando un efecto dominó que afecta a todos. Entre las principales causas se encuentran: la población que no separa correctamente la basura, la poca eficacia en la separación de residuos y la acumulación de desechos, cuyo foco de infección atrae enfermedades y mal olor.

A esto, se suma la problemática del destino final de los residuos que no son útiles, a partir de 2011, su principal relleno sanitario, el Bordo Poniente, dejó de recibir desechos; como medida alternativa, el gobierno de la ciudad ha tratado de llegar a un acuerdo con municipios y estados colindantes, en la mayoría de las veces, sin éxito. Actualmente, la gran mayoría de los residuos son llevados al municipio de Cuautla, en Morelos, mientras se busca una solución definitiva.

De no realizar acciones inmediatas en el tratamiento de sus propios residuos, a largo plazo la Ciudad de México se saturaría de basura, llegando a las calles (situación que ha sucedido en varias ocasiones), y provocando un colapso en el servicio.

Sabemos que casi toda la responsabilidad, es de las instituciones de gobierno, pero cabe recordar que toda esta serie de pasos a seguir, comienza por uno mismo. Te recomendamos separar la basura en residuos orgánicos e inorgánicos, y respetar los mismos señalamientos en los contenedores públicos; también te recomendamos verificar, si realmente lo que estás por tirar al bote de basura es un desecho, por ejemplo, la comida, donde el sobrante o lo que aparentemente está podrido, es tirado, cuando puede ser aprovechado de otra manera; por último, infórmate sobre cómo puedes contribuir con el aprovechamiento de los recursos que aún pueden ser útiles, como la composta.

Mientras una solución está en camino, y no exista una cultura adecuada, seguiremos preguntando: ¿a dónde va a parar nuestra basura?, pregunta que esperamos tenga respuesta muy pronto.

@PensemosVerdeMX