En los últimos años hemos vivido un aumento considerable de la contaminación, la quema de combustibles fósiles es el principal problema de nuestro mundo actual, día con día se acelera la proliferación de fábricas y productos que utilizan el combustible para funcionar, como los carros y las máquinas industriales.
El daño que causan los combustibles, no sólo es hacia nuestro planeta o a nuestro medio ambiente, los seres humanos no terminamos de comprender que los principales afectados por toda la contaminación que tenemos, somos nosotros, pues en los últimos años se ha notado un incremento de personas con problemas respiratorios, alergias y asma.
La contaminación en las ciudades dispara las posibilidades de padecer alergias, incluso en las personas que no son predispuestas a padecer este tipo de problemas.
Estudios revelan que más del 40% de la población es alérgica a algún elemento como el polvo, el polen e incluso el humo, esto es “gracias” a la cantidad de partículas de diesel que se encuentran en el aire y se cuelan en las vías respiratorias, infectando de químicos como el dióxido de azufre u óxidos de nitrógeno.
Los doctores mencionan que, poco se puede hacer al estar en constante contacto con la contaminación de la ciudad, pero un tratamiento de inmunoterapia y mantener todas las vacunas en regla, puede generar una mayor resistencia a las enfermedades respiratorias.
Con esto no nos queda más que seguir insistiendo que seamos conscientes con el uso de nuestros vehículos, que las empresas sean más responsables con el medio ambiente y utilicen biocombustibles y, del mismo modo, cuidarnos nosotros mismos revisándonos constantemente y haciendo caso a cualquier síntoma que nos afecte, por mínimo que parezca.