En el mundo, sabemos de la importancia que tienen las condiciones que experimenta el planeta a lo largo del tiempo, cuáles son los puntos débiles en los que estamos fallando, y cómo podemos solucionar los problemas, para que las próximas generaciones se encarguen de seguir realizando acciones adecuadas.
Todos conocemos los daños y las consecuencias que se han hecho al medio ambiente, en teoría, podríamos decir, que la responsabilidad corre a cargo de nosotros, en conjunto, como uno solo, pero, ¿sabías que cada uno de nosotros tiene un porcentaje de responsabilidad, y éste puede ser calculado? De eso se encarga la huella de carbono.
La huella de carbono es un estándar creado en 2007, por organizaciones ambientales, con el objetivo de medir, de una forma precisa, las emisiones de gases de efecto invernadero, que genera una persona a través de las acciones que realiza. Esta medida de referencia también puede servir para calcular el impacto de una organización, un producto o un servicio.
La medida principal es la emisión de dióxido de carbono, y para saber cuál es el impacto que se genera, se debe hacer un cuestionario muy elaborado; en el se incluyen todas las actividades realizadas, ya que muchos factores pueden influir en el desarrollo de cada acción, como el lugar, el método de fabricación y su uso.
En el caso de una persona, el cuestionario incluye dar detalles de sus diferentes actividades en un tiempo determinado. Entre las actividades a evaluar, se encuentran: el uso del transporte, el consumo de la electricidad, el kilometraje realizado en vehículo o motocicleta, tu traslado en avión, tren o autobús, la compra de diferentes elementos, etcétera; al final se obtiene un resultado, el cual indica las toneladas de dióxido de carbono que generas.
El análisis se hace de manera diferente, mediante una organización o producto, ya que además de realizar un estudio similar, existen certificaciones que valoran y evalúan esta medida, como el ISO-14040 y el ISO-14044, dedicados a temas ambientales. Para muestra, este ejemplo de una empresa de pan, que realizó un estudio detallado:
La teoría ya habló, pero ¿qué es lo que dice la práctica? Cosas nada alentadoras. El estudio realizado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) en 2014, indica que se está sobre explotando la huella de carbono que se debe dejar, para ser preciso, se está dejando un 50% más de lo debido, y si esto crece, para el año 2060, se estaría generando lo equivalente a tres planetas tierra en un solo periodo.
El estudio también arrojó medidas en México, de 1961 a 2014, la huella creció más del doble, cada persona dejó una huella equivalente a 3.27 hectáreas; en términos más comunes o coloquiales, lo que equivale a cuatro y medio veces el Estadio Azteca. Esto lo colocó como el tercer país de América Latina en generar más dióxido de carbono, solo por encima de Uruguay y Paraguay, mientras que los causantes de esto, es la quema de combustibles, la agricultura y la ganadería.
Como lo decíamos anteriormente, existen muchos factores que pueden influir en qué tanto impacto deja a tu huella de carbono, por cada actividad que realizas, pero lo que es cierto es que tú puedes controlar tu medida de consumo de materias provenientes de los combustibles fósiles, por lo que la mejor recomendación es depender lo menos posible de este componente.
Si quieres conocer de manera precisa tu huella de carbono, te recomendamos pulsar este mensaje para realizar un cuestionario que revelará tu cantidad. Recuerda que todos somos responsables de lo que pasa en este planeta, y es nuestro deber dejar una huella menos notoria, para las próximas generaciones.
Pensemos Verde 