La cartografía es una disciplina fundamental para entender el desarrollo de la sociedad y la cultura. Desde la Edad Media los mapas han servido tanto para crear mejores rutas de transporte, como para hacer divisiones políticas.
Existen muchos tipos de mapas, desde un simple croquis a mapas que nos muestran la densidad de población en todo el mundo, pero sin duda en nuestros tiempos Google Earth ha cambiado el rumbo y acceso a la cartografía global.

Google Earth empezó a ser desarrollado por Intrinsic Graphics a finales de los años 90, esta compañía que se dedicaba principalmente a crear librerías de gráficos para videojuegos. Su despunte ocurrió cuando la cadena CNN utilizó extensivamente el programa para cubrir la guerra en Irak, lo cual incluso tiró los servidores que daban acceso a la aplicación. Google adquirió la empresa debido a que 25% de sus búsquedas estaban relacionadas a localizaciones geográficas.
Todos hemos utilizado Google Earth o su hermano Google Maps, pero los usuarios convencionales quizá no logren dimensionar la importancia que puede tener esta aplicación, que nos puede mostrar virtualmente cualquier lugar del mundo e incluso crear una experiencia 4D que vuelva más realista nuestro viaje digital.
El año pasado Google lanzó la mayor actualización de Earth en mucho tiempo. Este update permite al usuario ver un video de cómo ha cambiado el paisaje en los últimos 35 años. A través de tecnología de la nube Google procesó más de 24 millones de imágenes satelitales que datan de 1984 a 2020 para crear un mega video de la Tierra a lo largo de estos años.
Google ha dicho que su objetivo es empoderar a los usuarios para crear un cambio positivo en el mundo. Con esto en mira la compañía se unió con CRATE Lab, un proyecto de innovación tecnológica, para darle un enfoque ambiental a las nuevas características de Earth.
CRATE Lab se encargó de darle sentido a los mapas, encontrando que hay 5 fenómenos emergentes que podemos vislumbrar a través de los mapas de Google Earth: deforestación, crecimiento de las urbes, aumento de la temperatura, explotación de los recursos energéticos y la fragilidad de la belleza de nuestro mundo.

Enfocándose en los mencionados fenómenos, CRATE Lab ha creado una serie de experiencias virtuales para crear conciencia en torno a la velocidad con que estamos dañando al planeta que cualquiera con una computadora e internet puede consultar. ¿Será posible que podamos aprovechar este tipo de herramientas globales para cuidar el medio ambiente a nivel local?
Fuentes: