De acuerdo a una investigación de la UCLA (Universidad de California), publicada en la revista Nature Ecology and Evolution, las aves, en términos evolutivos, están sufiriendo cambios dramáticos en muy poco tiempo, pues se descubrió que en 30 años las de América del Norte disminuyeron su tamaño en un promedio de 0.6% y algunas especies hasta un 3.0%.

Los investigadores involucrados en el estudio concuerdan en que el hecho de que el fenómeno ocurriera en la gran mayoría de las especies de aves, es evidencia de que es el cambio climatico el culpable de estos cambios, ya que el tamaño de las aves varía de manera predecible de acuerdo a su ubicación: las aves en lugares más cálidos tienden a tener cuerpos más pequeños que las de los lugares más fríos.
También se descubrió que las aves en lugares más cálidos se volvieron más pequeñas y a un ritmo más rápido, evidencia de que los animales se están adaptando, independientemente de su ubicación, a temperaturas más cálidas.

Otro dato curioso es que aunque el cuerpo de las aves se encogió, el tamaño de sus alas no lo hizo, ya que esta parte ayuda a regular mejor la temperatura corporal. En relación a este dato, el estudio demostró por primera vez a gran escala que las aves que viven en elevaciones más altas tienden a tener alas más largas, una adaptación que ayuda a las aves a volar en el aire enrarecido de los entornos montañosos.

Sin embargo, existe una preocupación creciente entre los investigadores al darse cuenta de que estos pequeños cambios no suceden con la misma rapidez que el cambio climático, lo cual pone en riesgo la supervivencia de la mayoría de las especies.
